La Hiperaula, disponible para todas las carreras de pedagogía de la U. San Sebastián, es clave para potenciar la creatividad e innovación dentro de las salas de clases.
Vía uss.cl
Según el último informe del Centro de Estudios del MINEDUC, más de 50 mil alumnos matriculados en un establecimiento educacional en 2021 decidieron abandonar sus estudios en 2022. Si a esto sumamos las cifras de asistencia promedio nacional del 2022 – de 5,3 puntos porcentuales menos que en 2019, previo a la pandemia – y la brecha educativa, estamos ante un complejo panorama para la educación chilena.
“Hay aspectos que se han perdido, como la autonomía y la convivencia, que son habilidades transversales primordiales en el desarrollo de los niños, y que dificultan aprendizajes posteriores”, indica Mariana Oyarzún, directora de las carreras de Pedagogía en Educación Básica y Educación Parvularia.
Haciéndose cargo de este adverso escenario y con el compromiso de entregar una mejor educación, la Universidad San Sebastián, lanzó en su sede Santiago, la primera hiperaula de Latinoamérica.
“Es necesario transformar el proceso de enseñanza por uno más dinámico e innovador, poniendo en el centro a los estudiantes. Con esto, podremos entregar mejores docentes a nuestro país, preparados para enfrentar los desafíos del siglo” asegura Jéssica Bastías, académica de Pedagogía en Educación Diferencial y coordinadora de la Hiperaula.
¿Qué es la Hiperaula?
Hiperaula es un nuevo modelo de enseñanza de la Universidad San Sebastián para sus estudiantes de pedagogía, que está cambiando la formación práctica de futuros profesionales de la docencia, reconfigurando la sala de clases desde un paradigma distinto e incorporando las tecnologías en el proceso de enseñanza y aprendizaje con foco en la formación pedagógica y en el aprendizaje colaborativo.
El aula, que ya está funcionando para todas las carreras de pedagogía de la U. San Sebastián sede Santiago y próximamente en Concepción, tiene como objetivo mejorar la formación inicial de los docentes. “En educación la innovación permite resolver y mejorar la calidad de la enseñanza y los aprendizajes”, afirma Bastías.
“Cuando un profesor tiene un desafío en su sala de clases y lo resuelve utilizando de manera creativa las herramientas que tiene a su alcance y logra que sus estudiantes aprendan mejor, innovó. Eso es lo que nosotros queremos, que nuestros estudiantes repliquen buenas experiencias en sus centros de práctica y futuros establecimientos educacionales”, asegura.
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