Vía Instituto para el futuro de la Educación, Tecnológico de Monterrey

Descubre fórmulas simples y fáciles para involucrar cognitivamente a los estudiantes en clases, ya sea se encuentren trabajando en un modelo presencial, híbrido o virtual.

Después de muchos meses de pandemia, estudiantes y profesores se esfuerzan por mantenerse concentrados y comprometidos con las clases. A continuación podrás leer ideas sencillas para involucrar cognitivamente a los estudiantes, ya sea en un modelo de aprendizaje presencial, híbrido o virtual.

Consejos para hacer más atractivas tus clases

Durante la pandemia los profesores han podido aprender algunas lecciones y experiencia sobre cómo captar la atención en momentos difíciles, haciendo las clases más atractivas desde el punto de vista cognitivo, más eficaces y productivas.

Lo primero antes de comenzar es averiguar qué saben los alumnos para no hacer los espacios de aprendizaje repetitivos. Esto puede ser tan simple como una encuesta rápida antes o durante la clase. También puedes preguntar a los estudiantes al azar para que compartan brevemente lo que saben sobre el tema de la semana, escriban o dibujen algo relacionado.

Es muy importante que los estudiantes puedan entender claramente lo que se espera de ellos, en cuanto a la asistencia, la entrega de tareas, el trabajo en el grupo, el encendido o apagado de la cámara, etc… Por ello, es necesario comunicar claramente las expectativas del curso, la semana e incluso por clase. 

Por otro lado, algo muy importante y necesario en el aula son las pausas, debido a que nuestra atención en una clase puede variar, ya sea por cansancio, por distracciones u otras razones. Es necesario un momento de descanso. 

La retroalimentación es esencial para nuestro rendimiento en el aula o en el trabajo. La retroalimentación a los estudiantes da forma a su aprendizaje y rendimiento en el curso. Dado que un profesor suele tener muchos alumnos, la espera de ese feedback puede durar muchos días. Así que la idea es acelerar ese proceso a través de la retroalimentación entre pares, mientras los estudiantes desarrollan su pensamiento crítico, su lenguaje y sus habilidades de retroalimentación.

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